Los dos últimos sábado he tenido boda. No es que sean demasiadas, pero teniendo en cuenta que a la última debí asistir hace unos 10 años, para mi han sido una novedad.
En mi inocencia pensaba que ciertas costumbres habían desaparecido, pero, ¡ay!, no ha sido así.
Ahí siguen, y al parecer gozando de buena salud, el recorte de la liga y del calzoncillo. Además también contamos con la presencia de la tuna...de la que no añadiré más, por no herir susceptibilidades.
4 comentarios:
¡Ala! Yo (por suerte) hace bastantes bodas que no veo corte de ligas o corbatas, y tampoco tuna. Y no te preocupes, que con la edad llegan las arrugas y las bodas... Yo, el año pasado dos, y éste cuatro. Lo más gamberro este año, en una boda que salieron de la iglesia a pedir a los amigos que parasen con los petardos, que no se oía al coro :-)
¿Herir susceptibilidades? De una boda, lo que sale herido es el bolsillo XD
Yo fui en abril a una y el once de octubre tengo otra: en mi grupo, la que no se casa está ya en fase de reproducción y es un sacadero de dinero por todos lados, ¡venga hacer regalos!
Yo he ido hoy a una boda, y he cobrado 33 lerus, jeje.
¡Qué bonita la tuna! "Pasaaa la tunaaaa en Santiagooooo cantando y tocandoooo la marchaaaa nupciaaaal!" :-D
Arghhh...........un tuno XD
Publicar un comentario